Ácido hialurónico (labios, ojeras, perfilamiento facial)

¿En qué consiste el procedimiento?

El ácido hialurónico es un relleno biocompatible que se absorbe completamente con el tiempo, por lo que su aplicación es segura y temporal. Se usa en diferentes zonas del rostro para dar volumen, mejorar la forma, levantar y hasta hidratar la piel.

Según el área que se trate, se emplea un tipo específico de ácido hialurónico que se adapta a la textura y las necesidades de la zona, evitando la formación de granulomas o bolitas que puedan sentirse o notarse. Es fundamental emplear productos de buena calidad para asegurar resultados naturales y evitar complicaciones.

Labios: para aumentar el volumen, perfilar y definir, o mejorar las arrugas verticales que se forman con la edad («código de barras»).
Pómulos: para aportar volumen, definir el rostro y suavizar los pliegues que aparecen alrededor de la boca.
Mentón y mandíbula: para armonizar el perfil facial y mejorar la flacidez en la papada.
Ojeras: para rellenar los surcos y dar un aspecto más descansado.

Ventajas del procedimiento

Aplicación ambulatoria en consultorio.
Duración de 8 a 12 meses.
Mejora el aspecto juvenil de la zona tratada y la calidad de la piel, dándole más luminosidad.
Permite dar volumen o perfilar el rostro para un aspecto más balanceado y armónico.
Si se utiliza correctamente, logra un efecto de «lifting» sutil y natural.